19 abril, 2024

“Sabía que le dejaba moretones y por eso le decía que tenía que separarse”

Spread the love

María Ignacia Galeano, amiga de la víctima, dio detalles de las agresiones que sufría Evelyn de parte del imputado. Un perito remarcó que la muerte fue muy violenta

Con la declaración de siete testigos, entre peritos forenses, efectivos policiales y una amiga de la víctima, continuó ayer en la sala de debates del Tribunal Penal Uno de Posadas el juicio oral y público por el femicidio de Evelyn Rojas, la joven trans que fue ultimada a golpes dentro de una estación de servicios abandonada de la avenida Uruguay en octubre de 2016. Por este expediente el imputado es Ramón Da Silva, quien ayer no estuvo presente en la sala debates luego de un requerimiento hecho mediante su defensa el martes y que se espera que se repita durante las jornadas de hoy y mañana. No así al momento de sentencia, cuando se espera que el encartado esté presente para conocer el veredicto de los jueces Viviana Cukla -presidenta-, Ángel Dejesús Cardozo y Marcela Leiva.

A lo largo de la jornada de ayer, los distintos profesionales que se presentaron ante el tribunal dieron cuenta distintos aspectos que tuvieron que ver con la graduación alcohólica que arrojaron los estudios bioquímicos practicados a la víctima, como así también las conclusiones forenses de la autopsia y los detalles del feroz ataque que sufrió la víctima dentro de la estación de servicio.

Pero uno de los aportes más esperados por las partes fue el de María Ignacia Galeano, trabajadora sexual y amiga de Evelyn, y una de las últimas personas que vio con vida a la joven.

En primera instancia la mujer dio detalles de la última noche que la vio en la esquina de la avenida Uruguay y calle Alemania, donde Evelyn solía estar. Sobre esa jornada contó: “Yo la vi a Evelyn, ella estaba muy tomada, yo le decía que deje esas cosas. En eso viene este muchacho, ellos empiezan hablar y yo me callo, al rato cruzó y él le siguió al otro lado de la vereda, ellos discutían por cómo hablaban, al rato él vino con una cajita de vino, tomaron y después forcejearon, al rato se fueron para el lado de la YPF que no funcionaba. Yo no le seguí y no sé si entraron o no, fueron discutiendo”.

Sobre cómo tomó conocimiento del femicidio confió que al día siguiente decidió ir hasta la estación de servicios ya que sabía que su amiga se quedaba a pernoctar allí. Contó que preparó una vianda y acompañada de quien en ese momento era su pareja fueron a buscar a Evelyn. Describió que por varios minutos llamaron por su nombre pero que nadie salió y que tras ingresar al predio se toparon con la escena del crimen.

“Yo le conocía a ella hace dos o tres años. La amistad es más de la calle, como no tengo amigas y ella andaba sola, nos juntamos; siempre anduvo sola y yo también. Compartía ratos con ella. Ella me contaba que este muchacho estaba muy enloquecido por ella. Yo le hablaba como mamá, sabía que le dejaba moretones y por eso le decía que tenía que separarse. Las veces que la encontraba sana me decía que ella iba hacer lo posible para separarse, pero en el último tiempo ella ya no venía bien”, reconoció María Ignacia, quien en aquel entonces vivía a muy pocas cuadras del lugar.

Ante la consulta de la querella, representada por la abogada Florencia González, la testigo comentó que en el último tiempo Evelyn ya había dejado de preocuparse por su cabello y su forma de vestirse.

Por otro lado, ante la pregunta del abogado defensor Mario Ramírez, la testigo recordó que en esa última etapa su amiga ya no estaba trabajando y confió que solía verla sentada en el piso o sobre una pared. “Ella después de que se enamoró empezó a empeorar”, añadió.

Muerte violenta

Luego del relato de la amiga de la víctima, tocó el turno al perito forense Víctor Darío Acosta, quien estuvo a cargo de realizar la autopsia al cuerpo de Evelyn.

Durante la lectura de las conclusiones hechas en la etapa de instrucción del expediente, el profesional remarcó que el ataque fue muy violento y que la joven tuvo traumatismo grave de cráneo y un traumatismo facial grave.

“Lo más llamativo que se advirtió fue una contusión en los parpados similares a los ojos de un mapache. La magnitud del golpe recibido fue severo, la cabeza fue en forma repetitiva a la estructura y todo el contenido cerebral estaba inundado”, reconoció Acosta, quien al explicar  la figura de los ojos de mapache detalló que se debió a varios golpes contra una superficie plana y dura, de golpe y contra golpe.

También agregó que en su informe se advirtió una lesión en el cuello, en el tronco, abdomen y que tenía signos de arrastre en la zona del abdomen que no fueron causales de muerte y que sí fueron provocados ya sin vida.

A su vez detectó contusiones, excoriaciones de 20 a 25 centímetros y que el golpe original fue en el lado izquierdo del rostro.

Por último, el profesional también advirtió que la víctima presentaba lesiones mínimas de defensa en la mano izquierda.

Por su parte, el bioquímico Carlos González, quien estuvo a su cargo el estudio toxicológico, también atestiguó ante el tribunal. Indicó que Evelyn tuvo un grado de intoxicación comparable con un coma, y a su vez, explicó a las partes los cuatro períodos en los que se divide una intoxicación y su repercusión en las personas.

En ese sentido indicó que en el período 4 es cuando se pierden los sentidos y comentó que en este estado  una persona está totalmente indefensa.

Quien dio cuenta de cómo fue encontrado el cuerpo y las distintas manchas de sangre halladas dentro de un sector vidriado y en un baño abandonado de la estación fue la licenciada en Criminalística Cecilia González, quien también dio a conocer sus actuaciones el día del hecho.

Contó que al ser requerida junto a personal de Policía Científica, tuvo que ingresar junto a los demás colegas al predio por una entrada ubicada por calle Herrera en donde su función fue la realización de una inspección ocular y la elaboración de un croquis del lugar y la toma de distintas fotografías.

“El sector donde estaba el cuerpo era vidriado. Hago una descripción general, el cuerpo estaba dentro de una fosa, se veía sólo una mitad. Se hizo un recorrido por el predio, en la zona aledaña a la fosa se encontraron signos de arrastre de cuerpo. En el baño se encontró una gran mancha escarlata, un short de jean con rastros de cabello. Sobre una pared se encontraron más manchas escarlatas y en el primer piso se encontró sobre la superficie con una frazada”, complementó González quien trabaja en la Policía de Misiones como profesional desde el 2005.

Ante la consulta del fiscal Martín Rau, la profesional reconoció que la víctima estaba vestida solamente en la parte de arriba con una prenda de color gris, sin ropa interior y sin calzados. Y agregó que sobre la fosa donde encontraron el cuerpo había sangre y un líquido que no supo precisar.

En tanto que el último en ser citado a declarar fue el ex jefe de la Dirección Homicidios, el comisario inspector retirado Gustavo René González, quien fue el encargado de dar detalles de cómo fueron las tareas investigativas para dar con el femicida.

Reconoció que en un principio se hizo muy difícil la identificación del sospechoso, ya que no tenía un lugar de residencia fijo y eso dificultaba mucho el trabajo de los investigadores. Aunque comentó que en ese momento le comentaron que Evelyn tuvo un episodio anterior en ese mismo lugar y en una publicación salió el nombre del acusado, pero como supuesto sereno de la YPF abandonada.

Además, González contó que el arresto se dio varios dias después en San Vicente y que no recordaba si tenía lesiones de defensa al ser ubicado. Y que sólo se encargaron del traslado a Posadas del acusado.

También confió que por un testigo con el que se habló en ese momento se supo que tras el hecho el imputado se escondió varios días debajo del puente El Zaimán.

En tanto que los otros dos aportes de la jornada lo dieron el subcomisario de la Policía Aníbal Ledesma, quien relevó rastros capilares en la escena del crimen, como la licenciada en Bioquímica Edit de los Ángeles González, quien confeccionó el estudio de alcoholemia.

Dicho estudio hecho mediante humor vítreo arrojó 3,52 gramos de alcohol en sangre. 

Total Page Visits: 201 - Today Page Visits: 1