Reforzarán vigilancia y vacunación contra la enfermedad en comunas fronterizas. Los casos se transmiten por la picadura de un mosquito Aedes aegypti infectado
Un mono aullador muerto por fiebre amarilla fue encontrado a escasos 30 kilómetros de la frontera con la provincia de Misiones. El caso de primate con la enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti fue confirmado en el municipio de Santo Antonio de las Misiones, Río Grande do Sul, Brasil, una zona cercana a las comunas misioneras de Alem, Azara, Apóstoles, San José, Itacaruaré, San Javier y Concepción de la Sierra, y del Norte correntino como Garruchos y Virasoro.
El hecho disparó las alarmas ante la posible aparición de más animales enfermos o incluso la llegada de la enfermedad a humanos. En tal sentido, rigen una serie de recomendaciones de manera temporal -en principio por 15 días- para redoblar los trabajos de prevención y detección de primates enfermos principalmente en las comunas antes mencionadas.
De esta manera, según supo este medio la Dirección Zona Sur del Ministerio de Salud Pública de Misiones dispuso una serie de acciones preventivas y un llamado a la vacunación contra la fiebre amarilla en personas que no estén inmunizadas contra la enfermedad.
Habrá especial foco en trabajadores temporales que estén en la zona y viajeros o aquellos que se dirijan a zonas de frontera. El objetivo es que la población comprenda la complejidad de la enfermedad, cómo se transmite, previene y los hábitos de los vectores.
Si bien en la provincia la cobertura de inmunización contra la patología es buena y ronda el 95%, igualmente se hizo un llamado a la vigilancia epidemiológica e intervención en terreno a las jefaturas de áreas programáticas II, III, IV y V que Salud Pública tiene en esos municipios del Sur provincial.
Con los agentes de salud se buscará levantar los índices de vacunación contra la fiebre amarilla y se instalarán puestos fijos de vacunación contra la enfermedad en puntos estratégicos fronterizos, garantizando cobertura y accesibilidad, determinó la disposición de la cartera sanitaria provincial.
El caso
Los monos carayá o aulladores son especialmente sensibles a la fiebre amarilla. En ellos la infección se manifiesta en forma aguda y tiene una alta mortalidad. Son una especie centinela porque advierten que la enfermedad está presente en la zona y hay que vacunar a la población.
Sobre el mono encontrado en la frontera, los medios brasileños informaron que el animal fue hallado muerto en una zona boscosa en junio. Pero el resultado confirmatorio de laboratorio se completó recién este mes. Se trata del segundo caso en primates en Río Grande del Sur este año.
En igual sentido, las autoridades brasileñas están abocadas a una investigación local en busca de más animales vivos o muertos con la enfermedad y verificar el estado de vacunación de la población en zonas aledañas.
A su vez destacan que desde 2009 no hay casos humanos confirmados de fiebre amarilla en ese estado brasileño. Y en 2008 se dieron los últimos contagios en personas en la provincia de Misiones.
A su vez, la Secretaría de Salud de Río Grande del Sur detalló que desde enero a junio de 2023 se reportaron 70 epizootias (muerte de uno o más primates) en 26 municipios del estado, involucrando la muerte de 73 animales. Se recogieron muestras de 66 de ellos. De ese total, la presencia del virus que causa la fiebre amarilla fue detectada en enero de 2023, en Caxias do Sul y ahora en la región de Santo Antonio de las Misiones.
Eventos previos
Hace poco tiempo la provincia junto a equipos nacionales debieron intensificar las acciones operativas en terreno y de vigilancia epidemiológica en humanos y monos carayá y caí también por la aparición de primates enfermos en la frontera del lado brasileño, próximo a San Pedro.
“Los resultados fueron positivos, no encontramos monos carayá muertos ni enfermos, se procedió a la captura de mosquitos para el estudio virológico. Inmunizamos en un obraje a un trabajador que reside desde hace muy poco en Misiones que no contaba con la vacuna contra fiebre amarilla”, habían dicho esa vez desde Salud.
Una enfermedad prevenible
La fiebre amarilla es una enfermedad aguda, hemorrágica, difícil diferenciar muchas veces de otras fiebres hemorrágicas virales o el dengue. Las provincias de Misiones, Corrientes y Formosa son tres de las que están en permanente riesgo de registrar casos de esta patología que se transmite a través de la picadura de un mosquito Aedes aegypti infectado. Si bien no tiene tratamiento, puede prevenirse usando repelentes y con una vacuna que es gratuita en la provincia.
Actualmente, el Calendario Nacional de Vacunación contempla que la vacuna se la deben aplicar residentes en zonas de riesgo como Misiones, Corrientes y Formosa y algunos departamentos de Chaco, Salta y Jujuy. La persona debe recibir una dosis a los 18 meses de vida, un refuerzo a los 11 años para quienes iniciaron el esquema entre los 18 y 24 meses y los adultos una única dosis.
Sin embargo, esta realidad podría cambiar pronto ya que se realizó en Misiones un estudio internacional sobre la vacuna de la fiebre amarilla. Los datos que produzca este trabajo servirán como base para nuevas recomendaciones de vacunación de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En cifras
95%
En Misiones la vacuna contra la fiebre amarilla es obligatoria y gratuita. Actualmente la inmunización ronda el 95% en la provincia.
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